El duelo en la cuarentena

La pandemia causada por el nuevo coronavirus ha traído consigo sus propias reglas, entre muchos de los cambios, también ha modificado las formas convencionales con las que, la mayor parte de la humanidad, se enfrentaba al duelo y a la despedida tras la muerte, imponiendo otras formas de hacer frente al dolor, reconfigurando todo el proceso desde el manejo de los cuerpos infectados, hasta la atención de las necesidades emocionales de los vivos.

Guillermo Mattiolii Jacobs, decano del Colegio Oficial de Psicología de Cataluña (COPC) indica al respecto que “El duelo consta de dos fases: la personal y la social. Esta segunda se ha visto disminuida considerablemente, así que la personal será más dolorosa y duradera”. En la misma línea se pronuncia el decano acerca del principal factor que ha cambiado con esta situación, e indica que se trata de: “La soledad. Ahora hacemos duelos en soledad. La dimensión social del duelo se ha bloqueado, así que cada uno tiene que encontrar su manera de reemplazar esa dimensión potenciando la individual”

El paso del COVID-19 por el mundo además de muchas pérdidas físicas, dejará incalculables heridas y secuelas psicológicas, este virus está golpeando directamente los elementos más preciados de nuestra sociedad, la salud, la economía y el tiempo. Asimilar un fallecimiento causado por el virus, requiere de una fortaleza mental aún mayor que en circunstancias normales.

Independientemente de las creencias y las religiones, desde tiempos remotos como sociedad hemos construido rituales en torno a la muerte, con el propósito de honrar a los muertos y consolar a los afligidos, estos protocolos cumplen una función de tipo emocional, ayudan a asimilar la pérdida y facilitan la comprensión de una realidad que hasta el momento es incierta. Los actos fúnebres que envuelven la muerte representan el inicio del duelo y de la canalización de la pérdida. Hoy prácticamente en todas partes donde ha llegado el coronavirus, los tradicionales rituales han sido anulados total o parcialmente por miedo a la propagación del contagio, creando imposibilidad de despedirse. Esto sin duda rompe con un proceso que, gracias a la cultura, todos tenemos interiorizado.

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Darían Leader, autor de “La moda negra. Duelo, melancolía y depresión”, explica cómo el duelo supone una larga labor y es diferente del dolor: “El dolor es nuestra reacción ante la pérdida, pero el duelo es cómo procesamos este dolor. Pensamos en su presencia en nuestras vidas, volvemos a recuerdos de momentos que pasamos juntos, esperamos escuchar su voz cuando suena el teléfono”.

La crisis sanitaria que aqueja al mundo ha hecho que se impongan medidas que afectan a todos de igual forma, pese a que cada ciudadano se encuentra en situaciones distintas y particulares, todos al mismo tiempo hemos tenido que renunciar repentinamente a rutinas, trabajos, amigos, entre otros por un bien común, la salud. La humanidad ha apostado por unirse y respetar la vida, a pesar de los grandes sacrificios que ello implica, posiblemente esto represente algo de consuelo para aquellos familiares o allegados de quienes perdieron la lucha contra este padecimiento.

Súmate al esfuerzo por controlar esta emergencia sanitaria, el Perú está en nuestras manos, sigamos las recomendaciones de nuestro Gobierno, quédate en casa”

Escrito por: Abg. Jessica Navarro

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